Nuestros clientes suelen tener muchas dudas con los materiales. Y es normal. No te preocupes, muchos han estado media hora delante del escaparate de la óptica mirando cajas de lentillas para saber cuál elegir.
Te lo pondremos fácil. Iremos por partes. Al final, respondiendo cinco sencillas preguntas sabrás si te conviene elegir hidrogel o silicona y por qué.
Contexto para entender este tipo de lentillas
Las lentillas de hidrogel tradicional llevan con nosotros desde los años 70, son las veteranas del mundo de las lentes de contacto. Las de hidrogel de silicona aparecieron a finales de los 90.
Cuidado aquí. La elección no se limita a “nuevo material mejor que viejo”. Ambos materiales son excelentes. Cada uno se adapta a un tipo de usuario diferente, como veremos a continuación.
La diferencia fundamental entre hidrogel y silicona está en cómo dejan respirar a tus ojos. Porque tus ojos también necesitan respirar, o más técnicamente, necesitan oxígeno. Y ahí es donde está la clave entre estos dos tipos de lentillas.
Están hechas principalmente de agua y plástico blando. Tienen un contenido de agua que puede llegar hasta el 70%. Su composición las hace muy cómodas al principio del día. Al colocártelas sentirás comodidad y cierto alivio, es como poner una gotita de agua refrescante en el ojo.
El problema es que el oxígeno llega a tu córnea principalmente a través del agua contenida en la lentilla. Funciona, pero no es lo más eficiente del mundo.
Por eso, después de unas horas de uso, especialmente en ambientes con aire acondicionado o calefacción, pueden empezar a sentirse un poco secas. Es esa sensación de “necesito parpadear más” que seguramente conozcas.
Además, son un poco más baratas que sus primas modernas, suelen ser más cómodas para personas con los ojos sensibles y acumulan menos depósitos de lípidos, esas manchitas grasosas que a veces aparecen en las lentillas.
Resumiendo:
- Aportan gran comodidad inicial por su alto contenido en agua.
- Son más agradecidas con la limpieza.
- Tienen mejor precio.
- Suelen ser más cómodas para ojos sensibles.
- Pueden causar molestias en ambientes secos si pasas muchas horas con ellas.
¿Cómo son las lentillas de hidrogel de silicona?
Las de silicona son ideales para que el ojo respire con libertad. Permiten una mayor permeabilidad al oxígeno, hasta cinco veces más que las lentillas tradicionales de hidrogel.
Esta mayor permeabilidad al oxígeno significa que tus ojos se mantendrán más sanos y con menos irritación al final del día.
También son ideales si duermes la siesta con ellas puestas (aunque no deberías hacerlo) o si las usas durante más de doce horas seguidas (esto tampoco deberías hacerlo).
¿Todo es positivo? No. La parte menos buena es que la silicona tiene mayor dureza que el hidrogel puro. Al principio, algunas personas las encuentran menos cómodas, porque están acostumbradas a las tradicionales. Es como cuando estrenas zapatos nuevos y necesitas un período de adaptación.
Además, atraen más depósitos de proteínas y lípidos. Por eso, con las lentillas de hidrogel de silicona es fundamental mantener una buena rutina de limpieza.
Por último, también están el factor precio. Las de hidrogel de silicona suelen costar un poco más, pero muchos usuarios consideran que la inversión vale la pena por los extras que proporcionan a sus ojos.
Resumiendo:
- Permiten que el ojo respire más.
- Reducen las irritaciones.
- Necesitan un periodo de adaptación (al principio pueden resultar incómodas).
- Exigen una limpieza más cuidadora.
- Son un poco más caras.
Hidrogel o silicona, ¿cuáles son mejores para ti?
La respuesta honesta es esta: depende.
Probablemente esperabas una solución definitiva, pero la realidad es que cada persona es diferente. Es como preguntar si es mejor el café, el té o una infusión relajante de rooibos. Depende de tus gustos y necesidades.
Para saber cuál encaja mejor contigo, presta atención a siguientes preguntas. Guíate por la que te sientas más identificado.
¿Usas las lentillas ocasionalmente?
Ejemplo típico: usas las lentes de contacto solo para hacer deporte o para disfrutar de los fines de semana sin depender de las gafas. En este caso, las lentillas tradicionales de hidrogel podrían ser tu mejor opción. Proporcionan excelente comodidad, sobre todo para uso esporádico y de corta duración.
¿Tienes un presupuesto más ajustado?
Aquí tampoco hay dudas. Como comentamos al inicio, las de silicona son un poco más caras al incorporar un material más innovador. No son mucho más caras, pero sí suponen un 20 o 30% más de precio. Sabemos que para algunos usuarios el precio es determinante. Si para ti lo es, elige hidrogel.
¿Haces un uso continuado?
Si eres de los que llevan lentillas desde que se levantan hasta que se acuestan, las de hidrogel de silicona son tu mejor elección. La oxigenación extra marca la diferencia cuando hablamos de largas jornadas de 8, 10 o 12 horas. La silicona hará que ojo llegue al final del día con menor irritación. Tu salud general lo agradecerá.
¿Trabajas en una oficina?
Tanto el uso continuado de pantallas como el aire acondicionado tiende a resecar los ojos. En ese caso, la mejor opción son las lentillas de silicona.
¿Buscas comodidad inmediata?
No todas las personas se adaptan igual a las de silicona. Suelen exigir una fase de adaptación. Sin embargo, las de hidrogel tradicional proporcionan un confort casi instantáneo. Por tanto, si lo que buscas es comodidad desde el primer día, la mejor elección son las tradicionales de hidrogel.
Consejo final:
No se trata solo de elegir entre hidrogel tradicional o silicona. Se trata de encontrar las lentillas que a ti te permitan ver bien y sentirte cómodo durante todo el día.
Tampoco existe la respuesta universal. Cada persona es diferente. Pero tanto las lentillas de hidrogel tradicional como las de hidrogel de silicona son soluciones óptimas. La tecnología de ambas sigue mejorando año tras año.
Independientemente de cuál elijas, estarás escogiendo un producto hecho para cuidar tus ojos.
Si tienes dudas, habla con tu óptico u oftalmólogo de confianza.