¿Por qué tienes sensación de arenilla en los ojos?
“Siento que tengo algo en el ojo, como una especie de arenilla, pero no veo nada extraño dentro”.
Esta frase se suele repetir con frecuencia en las consultas oftalmológicas.
La molestia puede ser indicativa de varios problemas oculares, en la mayoría de casos responde a una condición leve que puede desaparecer espontáneamente gracias a las lágrimas y al parpadeo, pero en otras ocasiones puede ser un signo de un problema subyacente más grave.
Te contamos cuáles son las causas y cómo encontrar la solución.
¿Qué causa la sensación de arenilla en los ojos?
Existes numerosas causas que pueden estar provocándote esa sensación similar a tener una arenilla metida en el ojo.
Cuerpos extraños
Lo primero que debes descartar es que pequeñas partículas de polvo o arena hayan quedado atrapadas en el párpado causando esa molestia. Esto es muy común, especialmente durante los meses de verano. En la playa es relativamente fácil que una arenilla termine alojada bajo el párpado. Del mismo modo, también puede ocurrir que otras partículas lleguen al ojo debido al viento o a ambientes polvorientos.
Esta sensación de arenilla también la puede causar una simple pestaña suelta. Cualquier objeto extraño situado en el párpado, especialmente en el párpado superior, puede generar estos problemas.
Ojo seco
El síndrome del ojo seco es otra de las causas más frecuentes. Se debe a una producción insuficiente o de mala calidad de las lágrimas, lo que provoca sequedad en la superficie del ojo y esa sensación de “tener algo en el ojo”.
Blefaritis
Consiste en una inflamación de los párpados que suele asociarse con la formación de orzuelos, a menudo debido a una infección o una condición de la piel como la dermatitis seborreica.
Alergias
Las alergias estacionales o a sustancias específicas también pueden causar irritación y sensación de arenilla en los ojos.
Uso prolongado de pantallas
La exposición prolongada a pantallas de ordenadores, móviles y otros dispositivos es otra de las causas frecuentes que suele provocar estrés ocular y sequedad, dando como resultado la mencionada molestia en los ojos.
¿Qué otros síntomas pueden acompañar a esta molestia?
En la mayoría de ocasiones la molestia no va más allá del incómodo proceso que supone “tener algo en el ojo”. Otras veces se acompaña de estos otros síntomas:
- Enrojecimiento ocular.
- Lagrimeo.
- Picor.
- Visión borrosa.
- Sensibilidad a la luz.
¿Cómo saber qué está causando el problema?
Para diagnosticar la causa exacta de la sensación de arenilla en los ojos, lo mejor es que acudas a un profesional de la visión para que realice un examen visual con el que podrás determinar con exactitud el origen del problema.
Si no puedes o no quieres acudir a un especialista, puedes descartar las causas anteriores una a una. Responde a las siguientes preguntas:
¿Has estado mucho tiempo delante de pantallas? La fatiga visual podría estar detrás de esa “arena en el ojo”.
¿Notas los párpados inflamados? Podrías estar sufriendo una blefaritis.
¿Sueles padecer de ojo seco? Probablemente esta sea la causa principal del problema.
¿Eres susceptible a alergias? Quizá tus ojos se hayan irritado reaccionando a los alérgenos.
¿Has pasado tiempo en una zona con polvo en suspensión? Esto puede pasar en múltiples situaciones: la playa que antes mencionamos, una zona de obras o un simple paseo por la naturaleza en un día ventoso podrían haber hecho que algún objeto extraño terminara en tu ojo. Y a veces ni eso, en ocasiones los cuerpos extraños llegan sin explicación aparente.
¿Cómo acabar con la sensación de arena en los ojos?
El tratamiento varía según la causa subyacente.
- Cuerpos extraños: Levanta suavemente el párpado y trata de confirmar o descartar la presencia de pestañas o elementos extraños. Es mejor que lo hagas con ayuda de otra persona. Una vez encontrado el “objeto”, retíralo con un bastoncillo de algodón o acude a un especialista para que lo haga con seguridad. Después, realiza una limpieza cuidadosa del ojo.
- Ojo Seco: Usa lágrimas artificiales o aplica un tratamientos para el ojo seco. Ambas alternativas combatirán la sequedad ocular ofreciendo una alivio instantáneo.
- Blefaritis: Si observas el párpado inflamado junto con lagrimeo, tendrás que acudir al especialista para que realice un diagnóstico preciso y paute un tratamiento que podría incluir la limpieza a fondo de los párpados y el uso de antibióticos tópicos.
- Alergias: Durante la primavera es común sufrir este problema en los ojos. Para combatirlo puedes recurrir a antihistamínicos, a gotas oftálmicas antiinflamatorias o a gotas para alergias.
- Prevención en el uso de pantallas: El uso de lágrimas artificiales mejorará el confort del ojo, pero en este caso la solución consiste en dar un descanso prolongado a los ojos evitando el uso de cualquier tipo de pantalla o haciendo uso de gafas con filtro azul si tienes que seguir delante de dispositivos electrónicos.
¿Cómo evitar que vuelva a suceder este problema?
Primero, mantén una correcta higiene ocular. Recuerda hidratar el ojo si tiendes a sufrir el síndrome del ojo seco y realiza una limpieza ocular diaria con productos específicos.
Además, sigue estos consejos para que el problema no vuelva a repetirse:
- Usa gafas de protección en ambientes polvorientos o ventosos.
- Realiza descansos regulares al usar pantallas.
- Evita frotarte los ojos.
- Usa humidificadores si resides en una zona de ambiente seco.
Con la sensación de arenilla en los ojos es importante no ignorar los síntomas y consultar a un profesional de la salud ocular para que realice un diagnóstico preciso y paute el tratamiento adecuado.
En cualquier caso, este artículo proporciona una visión general, siempre es recomendable buscar la opinión de un profesional sanitario.
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