Lágrima artificial
LÁGRIMA ARTIFICIAL
La lágrima artificial permite lubrificar tanto las lentillas como los ojos.
Son muy útiles para aliviar molestias oculares, como sequedad ocular o contrarrestar factores ambientales que provocan la evaporación de las lágrimas naturales, cómo el aire acondicionado o calefacción.
Una lentilla seca no solo es incómoda, también puede causar alteraciones en el epitelio corneal que puede provocar abrasiones, infecciones y/o úlceras corneales.
Esto se debe a que la lente de contacto no debe estar en contacto con la córnea, sino flotar sobre la lágrima.
La lágrima artificial combate y reduce los síntomas de irritación y sequedad ocular asociados al uso de lentillas, proporcionando alivio, frescura, mayor comodidad y un mayor confort.
No todas las lágrimas artificiales son iguales.
Si eres usuario de lentillas, debes usar las que están indicadas para las lentes de contacto. La clave está en el preservante y la viscosidad, los cuales pueden dañar tus lentillas.